Paseando hace poco por Zaragoza vi este lindo caballlito: Es un caballito de madera perfectamente conservado, perteneciente a un supuesto tiovivo, que debe permanecer en numerosos rincones olvidados de todas las infancias perdidas. Me ha recordado a otro similar que daba prestancia a un hotel en la ciudad de Marrakech.
Son de agradecer las iniciativas que acercan la cultura a los ciudadanos, y dentro de esta categoría hay que agradecer que al pasear por el centro de Zaragoza uno se pueda encontrar con las estatuas de Rodin. Ademas están al aire libre en mitad de la calle con lo que pueden ser saboreadas desde todos […]
He despertado y el sol había salido. Aunque era verano una suave brisa enfriaba las calles. He sentido los papeles que arrastrados por viento se arremolinaban en cualquier rincón y me he sentido uno de ellos, arrojado en cualquier lugar como algo que deja de ser útil, Y he sentido el cariño convertido en un […]
